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Tener piel grasa es un síntoma común de nuestros rostros. La piel grasa tiene una textura cerosa, brillante y grasienta al tacto, lo que también puede obstruir los poros y causar acné. Usar maquillaje cuando tienes la piel grasa puede ser todo un desafío.
Nuestra piel produce una sustancia cerosa y grasa para proteger e hidratar. Se llama sebo y es producido por las glándulas sebáceas. Cuando hay mucho sebo en la piel, se pone grasosa.
El manejo de la piel grasosa a menudo requiere de algunos hábitos para su cuidado.
Lávate la cara cada mañana, cada tarde y después de hacer ejercicio. No te frotes la piel, ni siquiera para quitarte el maquillaje.
Elige productos para el cuidado de la piel que estén etiquetados como "libres de aceite" y "no comedogénicos".
Usa un producto para lavar tu rostro que sea suave y espumoso en lugar de uno muy fuerte.
Evita los productos de limpieza a base de alcohol.
Aplica crema hidratante todos los días para mantener tu piel hidratada.
Si estás al aire libre usa un protector solar con un factor de protección solar de al menos 30.
Elige un maquillaje sin aceite, a base de agua.
Quítate el maquillaje antes de dormir.
Usa papel secante cosmético durante el día para absorber la grasa.
Evita en lo posible tocarte la cara.
Tu piel puede volverse grasa debido a un desequilibrio hormonal. Si estos consejos no parecen funcionar, consulta a tu médico para encontrar un tratamiento diferente.